Con Junior Narváes el futuro ya llegó. El juvenil trelewense se ha convertido en el eje de una transformación y en la cara visible del “nuevo” boxeo. La cuestión generacional parece ir quedando de lado para que ahora el “hijo de” pase a convertirse en el “padre de” dando vuelta la historia. Junior luce hoy en un momento de esplendor boxístico nada casual. Hay trabajo, disciplina, talento e ideas claras. Un pibe que piensa y habla como grande. “Contento por las peleas y la experiencia que estamos ganando pero más aún por tener un Nacional Juvenil un Chubut. Tenemos en casa un torneo de gran nivel”. Junior reconoce estar plenamente enfocado en su carrera. “Quizás es el momento más difícil porque es el de sumar para mejorar y crecer día a día. Estamos tratando de foguearnos lo más posible para llegar al máximo nivel en el que se pueda estar”, sostuvo.
“El sueño olímpico siempre está presente. Como todo deportista creo que es la meta más alta. Siempre tengo las puertas abiertas a la Selección para representar al país. Hoy les toca a mis compañeros poder clasificar y los estamos alentando desde acá” agregó respecto a la delegación que participará del último Preolímpico en Bangkok. “Es bueno que alguien de Chubut esté en una Selección porque muchas veces, hay información que no llega y todo solía centrarse en Buenos Aires o Córdoba donde la gente se relaciona más con éste deporte”.
Finalmente Junior Narváes resaltó la posibilidad de poder combatir y mostrarse en su provincia natal. “Es lindo poder estar en casa, mostrar un poco y que tanto la familia, los amigos y el público puedan acercarse a ver. De toda mi carrera creo que es la segunda o tercera pelea que estoy en la zona”.
“Mi papá siempre está y siempre estuvo en el momento del entrenamiento y siempre están presentes sus consejos y sus estrategias. En mi rincón me acompañaron mi tío Daniel y mi primo Ian. Este año quiero foguearme, seguir aprendiendo y haciendo experiencia internacional y poder llegar al profesionalismo de la mejor manera “.