Una vez más, la chubutense Karen Nahir Almendra acarició el triunfo siendo visitante y marcando en el ring, aspectos que no fueron considerados por los jurados en su pelea ante Milagros Herrera. Imponiendo el ritmo y proponiendo desde un ataque que se hizo sostenido, Almendra hizo méritos para “traerse” algo más de ésta nueva experiencia en Buenos Aires. Las tres tarjetas dieron 40-36 al cabo de los cuatro rounds. Y ahora la chubutense cuenta con 1-3 como profesional mientras que Herrera sigue invicta con 4-0.
La pupila del cubano Díaz Pequeño dejó en el ambiente una sensación de paridad que incluso se ratificó a través de un pedido formal de revancha que Almendra y su equipo deberán evaluar. Lo cierto es que más allá de los buenos rendimientos que se pueden alcanzar y sin importar en muchos casos, la jerarquía del/la rival, existe una norma escrita que impide que éstas buenas producciones se traduzcan en resultados. El combate se llevó a cabo en la sede del Sindicato de la Maestranza en Virrey del Pino y era parte de una velada que incluía en principio, al comodorense Ariel López quien no pudo combatir por el exceso de peso de su rival Bruno Acosta.