La clave de todo es el entrenamiento constante. A tiempo completo y siempre lista para armar la valija, pesarse y rendir aunque sea del otro lado del mundo. A Soledad Matthysse las suspensiones la ponen a prueba y no la debilitan. Todo lo contrario. Se cayó primero Puerto Rico por un motivo poco profesional: razones económicas que llevaron primero a una suspensión y después a “recortar” pasajes del equipo. Canadá comenzó como una unificación con dos títulos en juego y por falta de acuerdo monetario, solamente la local iba a exponer su faja. Todo se terminó postergando sin fecha. “No nos afecta en nada en ese aspecto porque entrenamos siempre. Cuando hay fechas ya tratamos de reformar un poco y organizar los entrenamientos y alimentación para llegar bien a las fechas” cuenta Soledad desde la experiencia reconociendo que las peleas que se “bajan” demandan tiempo y trabajo invertido.
“No me desmotivo por la suspensiones pero solamente siento el bajón de estar a full; ya con toda la adrenalina, con la puesta a punto y esperando ansiosa la fecha de pelea. Hay gastos que conlleva la preparación y se hace muy difícil porque una se va organizando con todo: familia, casa; trabajo y licencias que es un papeleo que siempre se tiene que hacer”.
Resalta la tarea del equipo y los contactos siempre abiertos para que surjan nuevas oportunidades. “Mario (Narváes) está en contacto con promotores de otros países y siempre salen peleas. Apenas se me cayó la pelea; me metió enseguida en un evento. No alcancé ni siquiera a llorar por la que se suspendió. Salió enseguida la de Australia así que me siento feliz”, explicó la “Itaka”.
Con oficio de campeona, “Sole” asume que la clave está en cuidarse y no descuidar la balanza más allá de lo aconsejable. “Me cuido y trato de estar siempre a poco de la categoría. En lo personal quiero pelear seguido; estar activa y aprovechar mi salud. Cuando nos llamen siempre tengo que estar lista. Sólo cambia la estrategia porque mi técnico mira a las rivales para estar atentos y realizar el plan de pelea. De lunes a sábado hago la parte física con Federico Witteckamp quien me organiza los trabajos de fuerza, potencia musculación y aeróbico. Hasta se encarga de la alimentación. Ellos dos componen mi equipo, nadie más y realmente estoy muy conforme”. El 7 de diciembre viajará a Melbourne, Australia para enfrentar a la invicta local (7-0) Stephanie Lee Cutting por el título superpluma de la IBO.
“Con ésta pelea de diciembre creemos que es la última del año. Siempre esperando que salga algo más, ojalá pueda hacer otra pelea. Yo voy a seguir entrenando porque me encantaría poder pelear en Las Vegas, eso es lo que quiero en el 2025. También me gustaría pelear en Argentina aunque todavía no nos hemos sentado a organizar nada”.
